Algunas personas evitan ir al dentista por su percepción del dolor y la incomodidad. Con la tecnología y la odontología modernas de hoy, a la mayoría de los pacientes les resulta cómodo ir al dentista.

Los pacientes que temen ir al dentista pueden haber tenido una experiencia terrible con el último dentista que tuvieron. Algunos temen al dolor, incluso aquellos que tienen un umbral bajo para el dolor. Otros pueden sentirse avergonzados cuando el dentista les mira la boca, o algunos se sienten un poco abrumados una vez que se acuestan en el sillón dental.

En este blog, te daremos algunos consejos para cómo superar tu miedo al dentista.

1. Reconoce tus miedos

Es necesario afrontar y aceptar la ansiedad de ir al dentista. Una buena cosa que puede hacer es escribir esos temores de por qué tiene miedo de ver a uno. También puedes hablar con tu dentista acerca de lo que te genera ansiedad al hacerte controles dentales y operaciones antes de someterse a cualquier tipo de procedimiento, para que sepas cómo manejar la situación.

2. Encontrar el dentista adecuado

Las recomendaciones o el boca a boca ayudan mucho a la hora de superar el miedo. Busca listados de clínicas dentales y lee las reseñas de otros pacientes sobre la clínica dental o los propios dentistas. En la mayoría de las clínicas, si es tu primera vez, puedes solicitar una cita con el dentista que prefieres que te haga el procedimiento para que te sientas menos ansioso o asustado.

3. Trae un acompañante

Si es posible, trae un acompañante cuando visites al dentista. Algunas personas hacen esto para ofrecer una capa adicional de apoyo, e incluso pueden acompañarte durante el procedimiento en sí.

4. Usa distracciones

Hay diferentes distracciones disponibles mientras está en la silla del dentista. De esta manera, puedes concentrarte en lo que estás viendo, leyendo o escuchando, en lugar de concentrarte en el dolor que podrías estar sintiendo mientras te sometes al procedimiento. Puedes traer unos auriculares para escuchar música o incluso un audiolibro. Algunas clínicas tienen pantallas de televisión justo al frente o encima del sillón del dentista que pueden estar mostrando películas o series mientras te sometes a tu procedimiento.

5. Recompénsate

¡Por fin fuiste al dentista! Date un gusto con algo como recompensa por superar tu miedo. Es una buena idea pensar en lo que quieres recompensarse antes de someterte al procedimiento para tener la mente puesta en ese objetivo.

Recuerda que los tratamientos dentales están más avanzados que nunca en comparación con los tratamientos de hace unos años. Los dentistas están capacitados y actualizados con los últimos conocimientos en odontología, por eso son expertos en el manejo de dispositivos para asegurar la comodidad de tu visita.

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¿Alguna vez has tenido un dolor de muelas muy intenso? No es solo un inconveniente. ¡La sensibilidad a los alimentos fríos y calientes en realidad puede causar daños severos!

¡Pero no te preocupes! Estos son algunos de los mejores y más populares tratamientos para dientes sensibles.

¿Cuál es la razón detrás de su sensibilidad?

Algunos de nosotros nacemos con dientes que no tienen mucho esmalte, por lo que es más probable que sean sensibles porque el diente es más débil. Otras veces es causado por usar aparatos de ortodoncia o tener dentaduras postizas o después de un procedimiento dental como la extracción de las muelas del juicio, que puede cambiar el funcionamiento de los nervios en los dientes.

Sin embargo, la causa más común de la sensibilidad es el uso excesivo de productos con flúor como la pasta de dientes y el enjuague bucal, que pueden hacer que tus dientes sean más sensibles.

Algunas otras causas incluyen:

• Cepillarse los dientes con demasiada fuerza o usar un cepillo rígido
• Apretar y rechinar regularmente (especialmente por la noche)
• Alimentos y bebidas ácidos (café, cítricos, etc.)

Las mejores opciones de tratamiento para la sensibilidad dental

Si estás obsesionado con tener una sonrisa perfecta, visita a tu dentista. ¡Pueden identificar la causa del dolor de muelas y recomendar qué hacer al respecto! Dependiendo de las circunstancias, puede prescribir uno de los siguientes tratamientos.

Pasta de dientes desensibilizante

Uno de los tratamientos más comunes es la pasta dental desensibilizante, que contiene compuestos que ayudan a bloquear la transmisión de la sensación de los dientes a los nervios. Por lo general, necesitará algunas aplicaciones antes de sentir algún alivio.

Fluoruro

Tu dentista podría recomendarte aplicar flúor en las áreas sensibles de tus dientes, lo que fortalecerá el esmalte dental y reducirá el dolor. También pueden sugerir una receta para uso en casa que se aplica a través de bandejas personalizadas.

Desensibilización

Si tienes superficies radiculares expuestas en uno o más de tus dientes, podría ser el momento de una pequeña aplicación de resina adhesiva, ¡especialmente cuando se trata de sensibilidad! Si tiene suficiente dolor y necesita un poco de alivio de la irritación, esta podría ser una buena opción de tratamiento.

Injerto de encía quirúrgico

Si tu diente está comenzando a perder el tejido protector de las encías, también podría ser la razón detrás de su sensibilidad dental. Un dentista puede tomar un pequeño trozo de tejido de la encía de algún otro lugar de la boca y colocarlo donde sea necesario. Esto protegerá las raíces expuestas, ¡así que ya no sentirás tanta sensibilidad!

Endodoncia

La forma más efectiva de eliminar el dolor intenso de los dientes sensibles es tratarlos con un procedimiento avanzado como el tratamiento de conducto radicular (endodoncia).

Las mejores opciones de tratamiento dependen de la causa subyacente de tu sensibilidad y pueden variar desde una pasta dental desensibilizante hasta un tratamiento de conducto. Hable con su dentista para obtener más información sobre las extracciones dentales.

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En la Clínica Arancha Otero, somos expertos en tratamientos de salud dental. Para más información no dude en acudir a nuestra clínica.

Cuando las áreas internas de la boca se lesionan, pueden ocurrir infecciones debido a la invasión bacteriana. Es común notar una inflamación dolorosa que contiene pus (líquido espeso de color amarillo pálido). Si la secreción no se drena, puede causar molestias e hinchazón, lo que se denomina absceso dental.

El absceso crea un escudo para cerrar la infección, que es la forma en que su cuerpo limita la propagación de la infección bacteriana. Los abscesos se desarrollan rápidamente, pero a veces pueden pasar uno o dos días después de la infección inicial.

Tipos de abscesos dentales

El absceso relacionado con el diente (también absceso periapical) se usa para describir una úlcera dentro del diente. Estas úlceras ocurren cuando los nervios del diente mueren o comienzan a morir. Este absceso generalmente se desarrolla en la base de la raíz del diente antes de que el hueso circundante se vea afectado.

El absceso de las encías o absceso periodontal ocurre debido a una infección en el espacio entre la encía y el diente. La infección es causada principalmente por la acumulación de restos de comida entre el diente y la encía. En casos crónicos, las bacterias pueden acumularse debajo de la encía y dentro del hueso.

¿Qué sucede cuando tienes un absceso dental?

En la mayoría de los casos, los abscesos pueden causar molestias significativas y, por lo tanto, requieren tratamiento inmediato. A veces el dolor es leve o inexistente. Si se descuida, la infección puede continuar durante meses o incluso años. La condición no sanará automáticamente, lo que significa que no debe ignorar los signos.

Si no se trata la infección, se pueden producir complicaciones graves, como daños en los dientes y el hueso circundantes. Tu cuerpo puede intentar desarrollar un orificio de drenaje llamado fístula o “tracto sinusal” en el hueso y la piel para eliminar el pus. La apertura a veces se nota en la boca con una apariencia similar a un grano. Cuando esto sucede, es posible que percibas un sabor extraño en la boca.

La acumulación de presión es responsable del dolor del absceso. El tracto sinusal disminuye esa presión al vaciar el absceso. Esto puede hacer que el dolor desaparezca, pero la infección aún necesita atención médica.

En algunos casos, no tratar el absceso a tiempo puede causar la formación de un quiste (saco lleno de líquido) en la mandíbula. Si el diente ha sufrido daños extremos y necesita un reemplazo, el quiste puede desaparecer durante la extracción del diente. Si es posible salvar el diente, puede ser necesario un tratamiento de conducto para eliminar el nervio infectado.

Después de agotar esas opciones, puede ser necesaria una cirugía dental para extirpar el quiste. En situaciones raras, la infección que causa el absceso puede convertirse en complicaciones de salud graves.

Lo que puedes hacer

El absceso dental es una afección grave porque potencialmente puede conducir a otros problemas de salud. Si observas algún síntoma, debes informar a tu dentista de inmediato.

Si notas una hinchazón similar a un grano, lavate la boca con una mezcla de agua salada varias veces al día. Vierte media cucharadita de sal en un vaso agua. Esto puede drenar el pus y reducir la presión.

Incluso si eso alivia el dolor, aún debes programar una cita con un profesional dental de inmediato.

Después del tratamiento, el médico puede recetar analgésicos y antibióticos para aliviar el dolor y detener la infección.

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¿Por qué necesito ver a un periodoncista? ¿Qué pueden hacer por mí que mi dentista no pueda? Hay muchas razones por las que los pacientes pueden ser derivados a un periodoncista, pero la respuesta simple es que, un periodoncista está altamente especializado en terapias quirúrgicas y no quirúrgicas para restaurar la salud de las encías y los huesos que rodean tus dientes.

Los periodoncistas son los especialistas en el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad de las encías (técnicamente llamada periodontitis), que es una afección de la salud bucal que puede dañar tanto las encías como el hueso que rodea los dientes y, en última instancia, provocar la pérdida de los dientes. Los periodoncistas son cirujanos altamente capacitados que también son expertos en procedimientos quirúrgicos orales que incluyen extracciones de dientes, injertos óseos, colocación de implantes dentales, así como diversos procedimientos quirúrgicos orales estéticos. Aquí hay una lista de algunas de las condiciones que un periodoncista puede tratar.

Periodontitis

Seguro que has oído hablar de la gingivitis antes, si no por tu dentista, quizás por los anuncios de pasta de dientes o cepillo de dientes. Sin embargo, lo que muchos no saben es que, cuando no se trata, la gingivitis puede convertirse en periodontitis, una afección de salud oral grave que puede provocar una inflamación crónica de la encía y el hueso alrededor de los dientes, lo que a menudo resulta en la pérdida de dientes. Esta es la razón por la cual los periodoncistas se especializan para ayudar a los dentistas generales en el diagnóstico, tratamiento y manejo de estas condiciones para ayudar a prevenir la pérdida de dientes.

Durante las consultas de nuevos pacientes, el periodoncista realiza un examen completo y analiza tu condición única y todas tus opciones de tratamiento. Si se descubre que tienes periodontitis, el tratamiento puede incluir una limpieza profunda especial llamada raspado y alisado radicular (que elimina las bacterias dañinas debajo de las encías y de las raíces de los dientes), o un procedimiento quirúrgico menor como regeneración con injerto óseo o proteínas estimulantes de células madre llamadas factores de crecimiento.

Reemplazo de Dientes Perdidos con Implantes Dentales

Hay muchas razones por las que las personas pierden dientes o requieren extracciones dentales. En el pasado, la única forma de reemplazar los dientes perdidos era con dentaduras postizas o puentes, pero las recientes mejoras en la tecnología nos permiten usar implantes dentales para reemplazar solo uno o varios dientes. Los implantes dentales reemplazan la raíz de un diente y se adhieren al hueso debajo del tejido de la encía, estimulando el crecimiento óseo y evitando la reabsorción ósea. Adjuntas a los implantes hay coronas, como las que podría tener en un diente natural. O si faltan varios dientes, ¡a veces solo se pueden usar 4-6 implantes para reemplazar un arco completo!

Cirugía estética de las encías

Algunas personas no están satisfechas con la apariencia con demasiada encía de su sonrisa, o la falta de suficiente encía provoca la exposición de demasiados dientes cuando se ríen o sonríen. Un procedimiento quirúrgico menor llamado alargamiento estético de la corona es cuando se elimina el exceso de tejido de las encías, exponiendo los dientes naturales completos que se encuentran debajo.

La corrección de demasiada exposición dental es un poco más complicada y existen numerosas opciones de tratamiento. Si te preocupa la recesión de las encías o su sonrisa con dientes, tu dentista estará encantado de analizar tus inquietudes y las diversas opciones de tratamiento.

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La «alveolitis seca» es una condición dental que puede ocurrir en adultos después de que se les haya extraído un diente. No es muy común, por lo general afecta hasta solo el 5% de todos los casos, pero si le extraen un diente por algún motivo, es algo que debe tener en cuenta y familiarizarse con los síntomas. Es más probable que ocurra en la mandíbula inferior, pero también se sabe que ocurre en la mandíbula superior.

¿Qué es la alveolitis seca?

Durante el proceso de curación habitual cuando se extrae un diente, se formará un coágulo de sangre en el espacio donde se extrajo el diente. El propósito del coágulo de sangre es formar una barrera protectora para cuidar la encía, el hueso y los nervios debajo de donde se adhirió previamente el diente. En el caso de una alveolitis seca, el coágulo de sangre se desprende antes de que tenga tiempo de forjar un vínculo lo suficientemente fuerte con la encía, lo que significa que el agujero no puede sanar de manera efectiva.

Reconocimiento y diagnóstico de la alveolitis seca

Desafortunadamente, si desarrolla alveolitis seca, esto suele ser muy doloroso y deberá tratarse rápidamente. Aunque se esperan molestias en los días posteriores a la extracción de un diente, esto debería poder tratarse en casa con los analgésicos recetados por su dentista, por lo que si siente que el dolor está excediendo una cantidad ‘normal‘, hable con su dentista rápidamente.

La velocidad también es importante ya que la ausencia del coágulo de sangre significa que no hay una barrera que proteja la herida, lo que significa que los fragmentos de comida pueden penetrar en el agujero. La alveolitis seca generalmente ocurre un par de días después de la extracción de un diente y los pacientes generalmente notan que están experimentando un empeoramiento del dolor en el sitio de extracción, que se extiende por la cara y causa mucha incomodidad.

En una inspección más cercana, puede verse claramente que no hay ningún coágulo de sangre en el lugar donde solía estar el diente, y algunos pacientes pueden incluso ver el hueso expuesto. Muchos pacientes también reportan un sabor desagradable (ya menudo un olor) en la boca como resultado de la infección.

¿Cómo se trata la alveolitis seca?

La alveolitis seca generalmente requiere un viaje de regreso a un dentista donde la herida se limpia a fondo y, a veces, se aplica un vendaje. Una vez que se completa esta etapa inicial, su dentista también puede tratar la alveolitis seca con un ciclo de antibióticos para ayudar a curar cualquier infección. También pueden prescribir crema antiséptica para aplicar alrededor del sitio del diente extraído y podrían recomendar un enjuague bucal antibacteriano.

En la clínica trabajamos con pacientes a los que se les extraen los dientes para garantizar que sigan una buena rutina de higiene después de cualquier extracción dental para mitigar el riesgo de que ocurran condiciones como la alveolitis seca. Aunque es raro, puede suceder, pero podemos ayudar a reducir ese riesgo tanto como sea posible.

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