Cuando llega el buen tiempo aumentan el numero de comidas, cenas y salidas. Esto se traduce en un aumento de la ingesta de alcohol.
El alcohol afecta en muchos niveles a nuestra boca. La principal consecuencia es la erosión dental. Se trata de la perdida del esmalte de los dientes causado por un ataque ácido. Al erosionarse los dientes y producirse huecos, la dentina queda expuesta. Además aumenta la sensibilidad el calor y el frío.
Otro de los problemas que puede causar el consumo de alcohol es la reducción del flujo de saliva. La saliva impermeabiliza los dientes y remueve parte de la placa. Si no hay saliva, aumenta la proliferación de bacterias provocando caries, periodontitis o gingivitis. Además la falta de saliva puede provocar mal aliento.
En primavera se suelen consumir multitud de bebidas alcohólicas con altos niveles de azúcar ya que el buen tiempo incita a salir más, además es época de bodas y comuniones. Esto unido a la reducción del flujo salival, es un gran aliado de las caries dentales.
El alcohol también afecta a los implantes dentales causando ciertos problemas hepáticos que aumentan la posibilidad de hemorragia en estos implantes quirúrgicos. Por lo que las personas que consumen alcohol de forma excesiva no son candidatos idóneos para el uso de este tipo de implantes.
Tomar bebidas alcohólicas se ha convertido en una actividad social que se dispara con el buen tiempo. Por eso la Dra. Arancha Otero nos da las siguientes recomendaciones:
- Cepillarse los dientes después de beber alcohol.
- Beber agua o mascar chicle sin azúcar, con el fin de aumentar el flujo salival.
- Beber bebidas que tengo el menor nivel de azúcar posible.
En la Clínica Arancha Otero te ofrecemos todos los tratamientos para lucir una sonrisa perfecta durante esta primavera. Si deseas más información no dude en visitar nuestra clínica.
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