Bultos en la lengua: causas, síntomas y tratamiento

¿Alguna vez tuviste uno de esos pequeños bultos en la lengua que aparecieron de la nada? Estos bultos en la lengua (papilas agrandadas) pueden aparecer por una de muchas razones.

¿Qué son esos bultos en la lengua?

Recubierta con cuatro tipos de papilas, la lengua es un órgano integral dentro de la boca que ayuda al gusto, el habla, la masticación y la deglución. Hay cuatro tipos de papilas:

• Filiforme: Las papilas filiformes no contienen papilas gustativas. Están ubicados principalmente en el centro y la parte posterior de la lengua y son escasos en los lados.
• Fungiforme: hay de 200 a 400 papilas fungiformes en la lengua, lo que las convierte en las más comunes. Se encuentran en la punta y los lados de la lengua y son sensibles al gusto distinguiendo entre sabores dulce, ácido, amargo y salado, así como a la temperatura y al tacto.
• Circunvaladas: Estas papilas son tan grandes que puedes verlas a simple vista. Están ubicados en la parte posterior de la lengua, más cerca de la garganta.
• Foliadas: Son de menor tamaño y las de tipo foliado las puedes ver con tus propios ojos. Las papilas foliadas recubren los lados de la lengua y delante de las papilas circunvaladas.

¿Cómo se agrandan las papilas (protuberancias de la lengua)?

Cuando nota que se desarrolla una papila agrandada, puede resultar muy extraño. Los receptores nerviosos de la lengua son muy sensibles. No se alarme. La mayoría de las veces este proceso no es grave. La afección llamada papilitis lingual transitoria ocurre cuando las papilas se inflaman o irritan, explica un estudio internacional. Esto puede ocurrir por morderse accidentalmente la lengua al masticar, por el paso de un virus por el cuerpo o por la exfoliación normal de las células de las papilas.

Ciertas otras condiciones médicas también pueden hacer que las papilas se sientan diferentes. Una de estas afecciones es la glositis migratoria benigna (también llamada lengua geográfica). En esta condición, la lengua exfolia sus células a un ritmo inconsistente, dándole a la lengua una apariencia similar a un mapa que muestra que las papilas han desaparecido y finalmente vuelven a crecer. Otras condiciones que pueden contribuir a la inflamación papilar incluyen infecciones bacterianas o fúngicas, aftas, reacciones alérgicas, sífilis, herpes simple oral, cáncer o trastornos autoinmunes.

¿Es necesario el tratamiento para las papilas agrandadas?

A menudo no es necesario buscar tratamiento para los bultos en la lengua a menos que la afección dure más de siete a 10 días. El mejor consejo para cualquier lesión bucal que dure más de siete a 10 días es que el paciente programe una evaluación con tu odontólogo. Controlar el tamaño, el color y la ubicación de la lesión ayudará a su dentista en su evaluación. Si las lesiones sangran, se vuelven cada vez más dolorosas, aumentan de tamaño o se extienden, se recomienda que los pacientes busquen atención inmediata.

El cuidado en casa minucioso y de rutina es la mejor manera de mantener una boca sana. ¡Cepíllate dos veces al día y no olvides cepillarte la lengua! También se ha descubierto que dejar que las lesiones sanen, enjuagar con agua tibia con sal y beber mucha agua tiene éxito en el tratamiento de las papilas inflamadas o agrandadas.

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